miércoles, 27 de diciembre de 2023

AQUIBA

119 días.

Hablo de días y no meses porque vivir una experiencia en un rincón de África es un cúmulo de vivencias diarias, cada día es diferente, cada día se llena de detalles que hacen que el día sea único.

119 días de mucha vida, alegría, paz, incertidumbre, sorpresa, miedo, esperanza, frustración, tristeza, disfrute, dolor, tranquilidad... 119 días y punto y final a esta experiencia de vida que me ha removido y transformado.

Ahora me pregunto, ¿Y ahora qué hago con todo lo vivido, sentido, amado y orado? Tengo pocas certezas, pero sé que aquel 26 de agosto era una versión de mí y hoy soy otra. Es momento de reposar e integrar lo vivido en mí. Vuelvo a casa, enormemente agradecida y feliz, con el corazón lleno de nombres y con la sensación de que ahora soy un poco más sensible y más humana.

Punto y final en Malabo. En la vida, solo una coma, la misión continúa, sigo desenvolviendo el regalo de la vida.

Aquiba, aquiba, aquiba.

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

lunes, 27 de noviembre de 2023

OTRO MUNDO

El paso del tiempo. Pasan días, pasan semanas, pasan meses. Sin darme cuenta y a la vez dándome mucha cuenta, llevo 3 meses en Malabo. Día a día, momento a momento, con muchísimo bueno y momentos grises.

Podría decir mucho, sin embargo solo quiero contemplar el paso del tiempo. He visto crecer una piña, he visto algún amanecer naranja, he visto correr a lagartos, he escuchado el viento, me he sentido pequeña entre el ritmo de la ciudad sentada en un taxi, he abrazado a muchos niños y cada abrazo y cada palabra con ellos tiene mucho sentido para mí. He hecho mucho, espero haber sido.

Esta experiencia no va de hacer, esta experiencia consiste en estar y ser, no siempre lo he conseguido, pero me lo recuerdo con frecuencia. Esta experiencia es más que un voluntariado, es una misión. En la ecuación de mi experiencia siempre siempre quiero que esté Dios. Esta experiencia está llena de retos, tantas veces me siento desbordada con mis alumnos de 5° de primaria, desbordada ante la pobreza que incomoda, desinstala e interpela. Desbordada por el sufrimiento ajeno, que por momentos también ha sido propio. Desbordada y caminando sabiendo que esto no es una experiencia donde todo es alegría, gratitud e ilusión. Un amigo me dijo que África nunca deja indiferente y es así, aquí se vive, muchos sobreviven, otros hacen lo que pueden con lo poco que tienen, muchos disfrutan a pesar de todo. Otro mundo. Otro mundo lleno de VIDA. Otro mundo del que podemos aprender muchísimo.

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

lunes, 6 de noviembre de 2023

CADA ROSTRO

Muchas veces pienso que no soy turista, no estoy conociendo muchos lugares. Solo he ido a un pueblo, justo al lado de la ciudad, he tardado dos meses y pico en ver el mar. Me encantaría visitar algunos lugares de las isla que son impresionantes con parajes naturales sobrecogedores con cascadas, bosques y playas paradisíacas. Me encantaría visitar Ureca, el pico Basilé, Basapo, Luba, la isla de Annobón o la parte continental del país. Y puede que visite alguno de estos lugares pero no a mi ritmo, sino al ritmo diario cuando haya festivos o vacaciones. Tengo claro que no vine aquí como turista, vine para estar dentro, en mitad de la realidad conociendo personas y realidades, poco a poco.

El ritmo es progresivo, el primer mes conocí muchas cosas porque todo era nuevo, ahora este conocer no es diario, me muevo en un espacio y círculo pequeño "casa-colegio-capilla", no necesito mucho más, está bien así. Tal vez cuando vuelva no podré decir que visité muchísimos lugares e hice excursiones cada fin de semana, pero podré hablar de mis alumnos, mis compañeros catequistas, los profesores, las chicas internas... Y si sumo cada rostro y cada historia, siento que todo lo vivido es muy valioso.

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

jueves, 26 de octubre de 2023

SEMILLA EN LA TIERRA

“Somos batallas ganadas, somos semilla en la tierra”.

Llegó el 26 de octubre y con este día, he celebrado que llevo dos meses en Malabo. Dos meses llenos de alegría, acogida, incertidumbre, dolor, frustración, esperanza, reflexiones, ideas… Mucha vida.

Llego al día de hoy y reconozco que todo no está siendo fácil. Estoy rodeada de situaciones de pobreza. La pobreza me afecta, me duele y quiero que me siga afectando. Todo cambia cuando la pobreza es lejana, contada y la empatía dura unos minutos, a cuando la pobreza está justo en frente, es presenciada y tiene rostros y nombres conocidos y que forman parte del día a día. La pobreza es desgarradora, la pobreza causa sufrimiento, miedo, incertidumbre, desesperanza...

A veces, me pregunto si estoy preparada emocionalmente para gestionar todo lo que estoy viviendo, es muy complejo. Ser sensible al dolor del mundo y dejarse tocar por ello es necesario, pero es tremendamente duro. Todo esto me interpela, me transforma y resitúa mi centro de gravedad.
Con todo lo que estoy viviendo, me descubro subiendo y bajando entre muchas emociones, pero siento que soy batallas ganadas.

Con todo lo que estoy viviendo, aún hay lugar para la esperanza porque Dios está, abraza y alienta mi vida. Por esto, siento que soy semilla en la tierra.

domingo, 22 de octubre de 2023

ABRAZAR

“Abrazar personas es increíble, pero también podemos abrazar el momento, abrazar lo que soy, abrazar el contratiempo, abrazar el sufrimiento, abrazar el miedo, abrazar la tristeza… Abrazar la vida”. 

Estoy aprendiendo a abrazar el momento, a veces me descubro con la cabeza en algún recuerdo o en aquello que me encantaría hacer ahora y no puedo. Estoy lejos de casa, lejos de mi familia y mis amigos, hay días que la nostalgia pesa un poco más. A veces, me encantaría que el tiempo corriera un poco más rápido para abrazar a mi madre, desayunar con una amiga, reírme con mi hermana, dar un paseo con mi padre, ver una carrera de fórmula uno con mi hermano, ir a mi parroquia, estar con tantas personas que quiero… Pero aún quedan meses, para volver, y ahora creo que debo seguir intentando aprender a abrazar el momento, lo que estoy viviendo ahora. Vivo rodeada de detalles que me cuestionan, me hacen reír, me entusiasman, me entristecen, me generan frustración, otra veces, esperanza. 

Estoy aprendiendo a abrazar lo que soy. Soy valiosa porque si sumo todo lo que soy, me descubro única con limitaciones y defectos, torpezas y fracasos interiores, pero también me reconozco valiente, ilusionada, inquieta, buscadora, bondadosa y rebosante de vida y sueños.

Abrazar el contratiempo, también aparece en el camino y abrazarlo es un reto lleno de dudas y miedos, pero forma parte de un camino mucho mayor de lo que yo puedo alcanzar a ver.

Abrazar el sufrimiento. La pobreza esconde historias de sufrimiento, muchas de ellas no las veo de cerca, otras me llegan por las noticias de Guinea Ecuatorial, otras más lejanas me llegan con la cifra de muertos en una guerra atroz. En mitad del sufrimiento, hay personas, historias, rostros... No cifras.

Abrazar la tristeza. Hay tristeza cuando hay un lugar vacío, un abrazo que no se da y unas palabras de ánimo que no llegan. Hay tristeza, ante situaciones muy arraigadas que son así y no cambiarán en un mes ni en dos ni en un año, pero se puede sembrar y estar en lo pequeño, en el detalle, a veces, una sonrisa basta.

Abrazar la vida. Abrazarla muy fuerte, tan fuerte que se nos corte un poco la respiración y nos salga sonreír y agradecer. Abrazar la vida, ahora sé que la vida es para entregarla. Sin guardarme nada, sin el miedo a lo que puedan decir o pensar, sin "por si acasos". Comprender que mi vida es regalo y existe para compartirla.

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

sábado, 14 de octubre de 2023

A VUELOS

Os echo de menos, abuelos. Echo de menos subir arriba y veros en vuestro sillones viendo la tele, leyendo, cosiendo o durmiendo. Echo de menos daros besos y hablar, pasar horas sentada y tumbada en el sofá viendo una película, cenando y sobre todo, riendo. Siempre reías, abuela. Echo de menos saber que estáis justo encima de casa y poder ir, poder estar y poder abrazaros.
"Todo lo andado por ti".

Ahora sé que estáis, pero de otra forma, estáis en el recuerdo de comidas familiares, cenas con buñuelos, gachas o churros. Estáis, y os recuerdo en muchos detalles, así de repente, sin esperarlo, con el paso de tiempo cada vez siento menos tristeza y en ese instante, sonrío con agradecimiento por haber podido disfrutaros tanto durante muchos años.
"Hay miles de cosas que sueñan a ti".

Sé que estáis en el Cielo, sé que estáis con la familia y con amigos. Dadles un beso de mi parte a mis otros abuelos. No sé que pensarás, abuela, de que esté en Guinea Ecuatorial, bueno en realidad sí lo sé, por ahora no me han comido ni tampoco estoy en una tribu con los negros del Congo.
"La fe que alborota, mil besos y un mundo por ti".

Abuelos, siempre seréis mis referentes y escuela de amor. "A vuelos" os recuerdo, mis alas se despliegan para intentar llegar un poco más alto y en cada intento, os abrazo con palabras. Os quiero muchísimo.

[Todo lo que está entrecomillado es de la canción "A vuelos" de Antonio Orozco]

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

domingo, 8 de octubre de 2023

HORIZONTE

No valen excusas ni medias verdades con una misma. Me miro al espejo y está mi reflejo, nada más. No vale buscar caminos fáciles ni cómodos, cuando ya sé lo que han andando mis pies, sobre que terreno están y hacia donde quiero dirijirme. Puedo seguir buscando una justificación que me escude en mi comodidad, pero con los años he aprendido a mirarme con honestidad y ahora sé quien soy, sé que el autoengaño no llena mi vida, más bien la vacía y hace que esté hueca de vida.

Hoy estoy en un momento, en el que soy muy consciente de que me estoy jugando mucho en cada decisión, que ya llevo muchos intentos y en todos he aprendido algo sobre esto de vivir. Tengo aprendizaje acumulado (supongo que no mucho), pero suficiente para saber donde me siento en casa y donde siento frío.

Hoy quiero caminar consciente, en todo lo que vivo, abrazando el presente y abrazando la vida.
Cuando me planteo ciertos detalles de mi camino, siento un poco de vértigo y la responsabilidad de saberme protagonista de mi historia, pero nunca dueña, eso le pertenece a Otro.

Sé como quiero vivir, sé que valores me enraízan, sé que las emociones bailan, conozco algún sueño que me habita. Con todo esto, sonrío. El cómo lo tengo, pero el camino... ¡Cuántos caminos! Y entre todos, hoy presiento que solo un camino es mi camino. Sonrío y confío. Puede que esta vez, después de muchos intentos, haya llegado a un lugar con un horizonte claro y sí, sonrío, porque tal vez este sea mi horizonte.

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

viernes, 29 de septiembre de 2023

INTENTOS

Creo que vivo de intentos.
Mi vida ha estado llena de intentos y más intentos.

Algunos parecían erróneos, pues el nuevo camino me hacía volver a un punto de partida, pero con el paso del tiempo siempre descubro que el camino recorrido era necesario para aprender, para discernir, para descubrir(me). Cada camino que parecía ser el plan A tenía su razón de ser, y finalmente el plan B acababa siendo el plan. 

Con los años, me he hecho experta en abrazar el plan B, en mis estudios, en mi vocación, en pequeños detalles del día a día.

Ahora soy quien soy gracias a la suma de todos los planes, cada experiencia, cada lugar que he habitado y deshabitado y entre plan y plan siempre me he sentido en casa.

Hoy vuelvo a encontrarme en una situación así. De nuevo, quiero abrazar el plan B como única manera de seguir soñando mi vida y tejiendola siendo una aprendiz que puedo sentirme torpe, pero que poco a poco entiendo que los caminos de vida nunca son rectos y sencillos. Lo valiente es confiar y acoger el nuevo intento.

Creo que vivo de intentos y siempre descubro que cada intento tiene sentido.


Sé feliz (:


sábado, 23 de septiembre de 2023

29 DÍAS

 29 días en Malabo. Visto así, como una cifra puede parecer poco tiempo. Desde fuera, de manera objetiva es menos de un mes, unos cuantos días de un mes de comienzos, de vuelta a la rutina, de estrenar agendas, volver a colegios, universidades y trabajos. Desde dentro, han sido 29 días con la sensación de muchísimo más tiempo, estoy alucinando de cuanta vida cabe en unos cuantos días en un lugar en mitad de África.

29 días en los que se ha hecho realidad un sueño, llevo años soñando con vivir una experiencia en África. Estoy en Guinea Ecuatorial, alucinando con otro estilo de vida, cultura, costumbres y ritmos. Y a la vez, voy "normalizando" algunos detalles que los primeros días me llamaban la atención. Ya me parece de lo más habitual cruzar la calle entre coches porque no hay pasos de peatones, veo y no me sorprende ver a niños y mujeres cargando enormes garrafas de agua sobre sus cabezas. Veo como algo normal subirme al coche o un taxi y que la mayoría no lleve el cinturón puesto, o bien porque no se lo ponen o porque el coche es tan viejo que no es posible ponérselo, empiezo a acostumbrarme a escuchar pitidos de coches cada tres segundos. Veo normal que haga un buen día y al minuto esté cayendo la tormenta. Como ha pasado mientras escribo estas palabras.

Aún quedan muchísimas cosas que las veo extrañas, que me cuesta asimilar, que no comprendo o no entiendo y forma parte de este proceso de estar en un país tan distinto al mío, viviendo y conviviendo con personas de distintos países de África. Pero con esto esto, lo más bonito es que la acogida, las risas compartidas y la empatía es universal en muchas culturas, y esto da la sensación de hogar. Me siento sostenida y querida por las mujeres con las que vivo, esto es un regalo increíble.

El tiempo es muy curioso. Si hubiera vivido un mes de septiembre en Granada, no tengo ni idea todo lo que hubiese vivido, pero seguramente no habría contado los días, ni hubiera escrito un diario, ni hubiera hecho fotos para contarle a mi familia y amigos detalles de lo que estoy viviendo. Habría sido un mes más con comienzos como todos los inicios de curso y con reencuentros después de las vacaciones de verano (aunque este verano he tenido la suerte de estar y compartir momentos especiales con muchas personas importantes de mi vida). En cambio, septiembre se ha disfrazado de un mes extraordinario, lleno de emociones y alguna sorpresa que ni yo podía imaginar. A medida que pasan los días, siento que encuentro un lugar en todo este submundo que aquí llaman la misión, pero también al igual que siento que ha pasado más tiempo del que realmente ha acontecido, de la misma manera, siento que es mucho tiempo sin estar ni abrazar a tantas personas que están en España. Hablamos mucho, con algunas pienso que soy muy pesada, pero la distancia se nota. Las primeras semanas es como cuando me voy de campamento, con la intensidad de los días no hay espacio para echar de menos, pero cuando pasan los días y la intensidad inicial baja, valoras el hablar cara a cara, porque aquí una videollamada es casi imposible, valoras un abrazo, una conversación real, distendida, con sus palabras y silencios, sus bromas y sus miradas. Ya estoy deseando abrazar a personas que son hogar porque en estos días he aprendido que el hogar no es un lugar, es un par de brazos que te envuelven.

Quedan muchos meses y tengo la sensación que lo "esencial" de esta experiencia ya lo he vivido, por supuesto que tengo ganas de vivir todo lo que viene. Estoy segura que queda mucho por sentir y alguna que otra sorpresa más. Si me dijeran que mañana tengo un vuelo de vuelta a España, volvería feliz y agradecida por todo lo vivido. En este mes han llegado respuestas a mi vida y muchísimas preguntas que dibujan un camino que me ilusiona y enamora, en estos días he sido consciente que mi vida ahora está llena de oportunidades que quiero abrazar y hacerlas mías, a mi manera. Pero, si mañana volara a España, también tendría la sensación: ¿ahora vuelvo, ahora que comienza todo de verdad? Arranca el colegio y el internado, desde hace una semana, mi día a día se ha llenado de rostros de niños y jóvenes que todavía casi no conozco. Ahora llegan nueves meses en los que zambullirme en esta misión, ahora comienza la vida diaria con su ajetreo y horarios llenos de tareas desde bien temprano. Así, si mañana tuviera un billete de avión a España no cogería ese vuelo porque esta experiencia está arrancando, con lo vivido estoy más que feliz porque lo experimentado es un tesoro muy valioso, pero todo lo que viene... No puedo ni siquiera imaginar todo lo que viene. Estoy feliz, feliz, feliz.

Si lees esto, si eres familia o una amiga/o, decirte que te echo de menos y "pronto" te abrazaré, hoy te doy las gracias por estar, permanecer y acompañarme desde la distancia.


Confía


domingo, 10 de septiembre de 2023

EL CORAZÓN LLENO DE NOMBRES


Manuel. Felisa. Gloria. Petronila. Juana. Crisanta. Lucía. Leticia. Anunciación. José Ángel. Isaías. Josefina. Aarón. Jacinta. Jacinto. Carlota. Atenea. Gaspar. Jose Daniel. Dina. Casilda.

Todos los días son muchos los rostros que aparecen, las personas con las que me encuentro. Hasta hoy, la mayoría de encuentros son fugaces, intercambiamos algunas palabras y poco más.

Algo que forma parte de mi día a día es el desconocimiento. Esta semana ha comenzado el colegio y he conocido a algunos alumnos de ESBA (ESO en España), no tengo ni idea de las historias que hay detrás de cada joven. ¿Tendrán una familia donde sean queridos? ¿Tendrán a ambos padres? ¿Vivirán con otros familiares? ¿Cómo serán sus casas? ¿Vivirán en una situación de pobreza? Hablando sobre esto con Martha, me comentaba que más de la mitad de los alumnos del colegio tienen problemas familiares, y a lo largo de estos días han sido varios los comentarios de personas que no podían pagar la escolaridad o la cuota del internado. Muchos de los niños y jóvenes del colegio viven solo con la madre, o no viven con sus padres. Hay mucho que desconozco, ante esto solo puedo esperar, poco a poco, iré conociendo. Las historias de sufrimiento me interpelan y desgarran, la pobreza es tremendamente triste, las historias familiares difíciles son muy complejas.
Esta es la realidad en otro lugar del mundo, lo que en otros países es una realidad que existe, pero de manera minoritaria, aquí está muy extendida. Y duele, conocer de cerca estas historias me ayudan a recordar mi suerte de haber crecido en una familia estable, con amor, sin problemas económicos, con muchísimos privilegios. Hoy quiero compartir una historia que sí he podido conocer con más profundidad.

Ayer por la tarde fuimos de visita a casa de Casilda, ella es la cocinera de la casa de las religiosas con las que vivo. Estaba cerca de nuestra casa. Llegamos hasta un restaurante y se terminó el asfalto, comenzamos a caminar por un camino de tierra, se oía el sonido de botellas de plástico, un grupo de unos 30 niños de todas las edades jugaban en la calle. Seguimos caminando y el camino se estrechaba, cada vez más piedras y barro, comenzamos a descender por un camino difícil como si fuera pleno campo. Pronto llegamos a casa de Casilda, una casa muy pequeña con techo de chapa, nada más entrar ya estábamos en el salón, todo muy humilde, una televisión antigua, todo muy limpio. Casilda tiene 5 hijas, está divorciada porque su marido la dejó porque no tuvieron ningún hijo varón. Hablamos con ella y nos contó el accidente que tuvo este verano, se prendió el fogón y se quemó todo su cuerpo menos sus piernas, nos enseñó imágenes de sus días en el hospital, todo el cuerpo lleno de quemaduras, se podía ver que se estaba recuperando mucho, ahora su cara y un brazo están casi bien y tiene un brazo vendado. Nos contaba su dolor diario, no puede dormir, pero estaba agradecida a Dios por seguir viva. Realmente es un milagro que esté viva.

Cuando íbamos a irnos, Eucharia llamó a las hijas y sobrina de Casilda que estaban en la cocina y todas juntas oramos. En este rato de oración, cantamos la canción "Dios está aquí, tan cierto como el aire que respiro", se me sobrecogió el corazón, en un lugar perdido del planeta un grupo de mujeres y jóvenes orábamos a un Dios que nos ama, en un lugar de pobreza, ante una historia de tanto sufrimiento. Solo podía callar y admirar la grandeza de la fe.


Al final del camino me dirán: —¿Has vivido? ¿Has amado?
Y yo, sin decir nada, abriré el corazón lleno de nombres. 
~Pedro Casaldáliga

martes, 5 de septiembre de 2023

A 3.954 KILÓMETROS DE CASA

Quiero darle vida a mi blog, últimamente está más parado. Aprovecho lo que estoy viviendo para plasmar en este lugar reflexiones a modo de bitácora de viaje. Si quieres conocer más sobre la experiencia en la que estoy embarcada, te invito a asomarte a mi cuenta de Instagram @educaresamar_ donde estoy compartiendo información y fotos de esta experiencia.

Llevo una semana en Malabo y estoy feliz, me siento muy agradecida de poder vivir en esta ciudad, viviendo con mujeres maravillosas (Marie, Laetitia, Martha, Mercy, Eucharia y Elizabeth, y pronto llegará Patricia). Afortunada de la misión en la que estoy, un colegio y un internado de chicas adolescentes. 

Estoy feliz y agradecida, esta sensación me habita. He vivido una semana intensa, parece mucho más tiempo. Estoy ilusionada por lo que vivo, por lo que vendrá, por los nuevos rostros que aparecen, por la vida compartida.

Quiero vivir esta experiencia desde la consciencia de la fragilidad de la vida, el valor del cuidado, la revolución del encuentro, el regalo del amor, el poder de la sonrisa y el abrazo de la gratitud.


Sé feliz (:

domingo, 11 de junio de 2023

EL TIEMPO PASA DEMASIADO RÁPIDO

El tiempo pasa demasiado rápido para aquellos que sueñan, para aquellos que ríen, para aquellos que bailan, para aquellos que abrazan.
El tiempo pasa demasiado rápido para quien sueña esperanza, llora de risa, baila sin música y abraza sin límites.

El tiempo pasa demasiado rápido para quien ve crecer a un niño, quien está disfrutando, quien agradece viviendo, quien ha entendido que esto de vivir es sencillo y compejo, pero nuestra tarea es hacerlo fácil a otros.

El tiempo pasa demasiado rápido para los utópicos que se pringan en proyectos ilusionantes, para los visionarios que reflexionan y dan un paso al frente, para los amantes que sueñan que el tiempo se para en ese momento sin reloj, para los soñadores de otros mundos, otros caminos y otros anhelos.

El-tiempo-pasa-demasiado-rápido. Si este segundo fuera de hielo, ¿con quién te gustaría estar?


Sé feliz

domingo, 14 de mayo de 2023

Camino (2): ILUSIÓN

 Ilusión.

La ilusión me habita por dentro, me construye, me invade.

Ojalá fuera capaz de tejer estas letras y cada palabra transmitiera esta ilusión.

Pocas sensaciones en la vida son tan bonitas como la ilusión ante un nuevo comienzo, proyecto o encuentro.

La ilusión es vida, vida que se mantiene como un hormigueo en la punta de los dedos, en la mirada, en la sonrisa.

La ilusión es un paso más, es saber que hay más y que voy a ello con todo lo que soy, con todo lo que sueño, con todo lo que amo.

El camino comienza antes de ponerse en marcha, caminar comienza dentro, cuando un sueño es más real, más cercano, más posible.

Camino porque sé que la ilusión ya me habita, y así, gracias a todo, puedo caminar, soñar, vivir y amar.


"Enamórate, permanece enamorado y eso lo decidirá todo".


domingo, 7 de mayo de 2023

Camino (1): VÉRTIGO

Vértigo. El vértigo se siente en la punta de los dedos. Se siente en ese pequeño vuelco en el corazón. Se siente en el pecho estremecido.Vértigo a lo desconocido.
Vértigo a las historias no comenzadas.
Vértigo al miedo, al descontrol, al abismo de los sentimientos que son torrentes.
El vértigo solo lo imagino hoy, si está en un espacio compartido con la ilusión, la esperanza y la confianza.
Ilusión ante la novedad.
Esperanza ante tanto por vivir, sentir, encontrar y abrazar.
Confianza como un hilo que me atraviesa, me sostiene y me hace sonreír.
Vértigo, ilusión, esperanza, confianza... Solo queda caminar. Lo que un día soñé, pronto puede ser vida, ojalá siempre vida y vida en abundancia.


"No busques que dar, date a ti misma".

domingo, 23 de abril de 2023

Micro Palabras (32): HORIZONTE

¿Cuantás vidas vivirías si pudieras elegir vivir más de una vida?
¿Cuántos "yos" nos habitan en nuestra única vida?
¿Una vida es suficiente?

No seré yo quien responda estas preguntas, ni quien crea que hay preguntas con una sola respuesta. Solo sabemos que tenemos esta vida, la presente, aquella que comenzó en un parto con un primer llanto y con los brazos de una madre, sosteniendo nuestra pequeña existencia.

Pasan días, uno tras otro, y nos hemos plantado en este momento, con unos cuantos años, con recuerdos, con proyectos y con sueños.

No tengo respuestas a estas preguntas, pero sí tengo una pequeña certeza (solo es mía): que poco es una vida para entregarla. La entrega que se teje en los abrazos, conversaciones, sonrisas, gestos, besos y miradas. La vida que se entrega, se regala, y solo desde ahí, encuentro sentido y horizonte.


Sé feliz (:

domingo, 16 de abril de 2023

Micro Palabras(31): ABRAZAR LA TIERRA

Pasearía por tantas playas con cielo estrellado.
Andaría caminos que sé que llevan a un pueblo de edificios de piedra y de personas amables.
Atravesaría bosques que tienen banda sonora de pájaros y crujidos de troncos con años de vida.
Soñaría playas, caminos y bosques y crearía una playa con un camino que desemboque en un bosque.
Soñaría para ser libre, para sentirme viva, para abrazar la tierra y sentirme creadora y parte viva de lo que ando, atravieso y sueño.


Sé feliz (: