La mayor aventura de la vida, las emociones. Ellas, a veces
sutiles, otras, desgarradoras. Condicionan cada momento vivido. No entiendo el
porqué, pero a veces la tristeza llega cuando tengo todos los ingredientes para
ser feliz, otras veces, la alegría permanece cuando estoy en una etapa con
turbulencias.
Aprendí que no debo
quedarme en el por qué, tal vez esto consista en vivir lo mejor que se pueda,
afrontar lo que viene, batallar cada
día, centrarse en los pequeños detalles...Mucha gente busca más, ansia más a
pesar de lo mucho que tiene porque nunca es suficiente, quiere lo mejor de lo
que esté a la moda, pero yo no soy conformista pero a veces mejor conformarse y
agradecer lo bueno que abunda porque
aprendí que menos es más.
No tengas tiempo para tener prisa (:
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