Si has invertido 30 minutos de tu día en ver este vídeo, seguro que no te has arrepentido. Gracias a Fran Russo que me ha mirado a los ojos y me ha dicho las palabras que justo ahora necesitaba. He aprendido mucho, más o menos todo ya lo sabía, pero él lo ha unido todo en un vídeo, y me ha arrancado sonrisas y hasta alguna lágrima con este mensaje lleno de esperanza.
Desde hace unos meses me pregunto cuál es el sentido de mi vida, intento marcar mis sueños, que al fin y al cabo son los vehículos que me llevan a ese objetivo, pero en la vida no hay destinos paradisíacos y felices, la vida es camino y la felicidad reside en cada paso firme que se dé con corazón, intentando hallar lo positivo del momento presente.
La vida es una prueba de amor. La mejor respuesta al odio es el amor. Me encanta desentonar, que la gente me diga que estoy loca que por qué soy tan caótica con tantos proyectos y tantas ilusiones, tantos planes y tantas ideas. Aparentemente mi vida parece un poco alocada e incoherente, pero detrás de cada decisión hay mucho reflexionado o tal vez un impulso rápido, que yo llamo corazonada. Esto sí que es incoherente, pero la vida es una simbiosis de reflexión e impulsividad, todo en su justa medida, a mí no me ha ido mal hasta ahora.
Ando perdida en esto de vivir, pero tengo claro cual es mi misión de mi vida. Siempre he creído que era dar; dar mi tiempo, mi talento, mi esfuerzo al servicio de una causa...pero, en realidad, no quiero dar, lo que yo deseo es darme. Quiero ser invisible, quiero ser un pequeño generador de cambio movida por amor.
Demasiado utópico tal vez, pero la utopía es el horizonte, nunca se alcanza, sin embargo, cada paso te acerca. No quiero escalar montañas ni atravesar mares, solo quiero caminar y dejar huella, siempre teniendo en cuenta que hay huellas que se borran con las olas.
Cada días más cerca de aquello que quiero ser, y ahora después de muchos años haciéndome la eterna pregunta de cual es mi razón de ser, poco a poco, gracias a muchas personas que han ido apareciendo en mi camino, puedo afirmar que siento una enorme ilusión al pensar que llevo una etapa andada, pero queda un largo camino por atravesar. Y solo pensarlo me llena de alegría, entusiasmo y una sensación inefable que a veces me hace cerrar los ojos, sonreír y sentirme amada por Dios, que me ha regalado la vida, y Él es un ejemplo de cómo vivir.
Siento que todo es posible porque la fe es un convertidor de imposibles en posibles. La vida no hay que batallarla con uñas y dientes y pisando a los demás para ser el mejor en algo, hay que batallarla con abrazos y sonrisas, miradas y un par de manos dispuestas a servir.
Sueño con que este mundo se ilumine de esperanza y la mejor bombilla para este gran alumbrado eres tú.
Sed felices (:
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